Se entiende por madres primerizas las mujeres que van a tener un bebé por primera vez en su vida. Esto hace que su embarazo, parto y los primeros cuidados del niño estén condicionados por la inexperiencia, y a veces desinformación, nerviosismo o preocupación excesiva por estos procesos. Por eso necesitan que se les de una buena educación, consejos y preparación para que ejerzan la maternidad de la mejor manera posible.
Hoy en día existe una gran variedad de cursos de preparación sobre el tema para fomentar la educación de estas madres, ademas de los consejos de profesionales médicos, matronas, etc.
Los consejos más recurrentes para ellas suelen ser relativos a la lactancia, las precauciones sobre el embarazo o la alimentación e higiene del bebé recién nacido. Aquí van algunos de los más típicos:
Durante el embarazo conviene no consumir alcohol ni tabaco, controlar la alimentación para no ingerir grasas en exceso y tener una dieta equilibrada, además de no hacer grandes esfuerzos en la última fase del embarazo.
Sobre la lactancia, decir que nada más nacer el bebñe no tiene por qué mostrar interés en mamar inmediatamente, puede tardar hasta una hora en hacerlo. Al principio, es recomendable darle unos 5 minutos de toma en cada pecho, para luego ir aumentándolo a medida que los pezones de la madre se vuelven más duros. Ante todo, no olvidar que, si todo falla y a la madre le es imposible dar el pecho por cuestiones de salud o fisiología, ¡siempre queda el biberón!
También hay algunos consejos más generales como bañar al bebé dos o tres veces a la semana y no todos los días, esterilizar todos sus utensilios hasta el primer año de vida y no abrigarle en exceso.
Las madres primerizas pueden servirse de todo esto para asegurar una maternidad beneficiosa para su hijo.